
Recurrentemente pienso en la forma tan veloz como la tecnología entrega diariamente nuevos recursos para la utilización en educación, cada vez me sorprendo más y mi expresión y exclamación de admiración se hace más profunda y prolongada. Hace apenas unos días, tuve la oportunidad de ver la forma como un presentador de noticias utilizaba un pizarrón digital para mostrar de forma bastante didáctica los resultados electorales para congreso en mi país (Colombia).
En aquella pizarra el ágil periodista desplegaba una cantidad de aplicaciones con su dedo índice derecho, teniendo acceso a los resultados regionales del escrutinio que iba entregando periódicamente la registraduría; a mapas digitales con los porcentajes de voto por partido y candidato, para cámara, senado, consulta interna y parlamento andino; a graficas interactivas que mostraban periódicamente el avance de los candidatos; también a una animación digital con las respectivas curules del senado por partido, en fin, me sentí gratamente sorprendido con aquel nuevo invento convencido que era una tecnología adquirida por el canal de televisión exclusivamente para ellos y bastante costoso como para algún día maniobrarlo, sin saber siquiera el nombre y sin imaginarme que esta misma tecnología se podría usar en una de mis clases. Mi admiración frente al artilugio digital se vio recompensada esa misma semana al realizar un trabajo para mi maestría en el que había que leer un texto sobre las Pizarras digitales, ¡Caramba!, las elecciones habían sido una premonición y el periodista hacia las veces de mi oráculo personal, aquel artilugio que parecía una ilusión mágica se llamaba pizarra digital y hace algún tiempo, no muy largo por supuesto, se viene usando como herramienta fundamental para facilitar el trabajo en algunas aulas de clase en todo el mundo. Me pude dar cuenta que la utilización de este “tablero” era bastante sencilla y que no era nada de otro mundo, que cualquier colegio a través de un proyector, una CPU, la respectiva pizarra y software tenia la posibilidad de acceder a una experiencia maravillosa de enseñanza y aprendizaje interactiva.
Ahondando un poco mas en el tema hoy me entero que hay varias empresas que están fabricando y comercializando este tipo de herramienta cuyas bondades han sido mencionadas en los párrafos anteriores, como Promethean y smartboard, cada una de ellas ofrece características básicas de la pizarra digital, como la posibilidad de escribir sobre las aplicaciones, reproducción de archivos multimediales, y recursos tradicionales del computador, teclados portátiles, uso táctil, recursos en la web entre otras, sin embargo cada una de las empresas ofrece elementos adicionales que hace aun mas tentadora la posibilidad de adquirir uno u otro. La pizarra escogida seria la SmartBoard, ya que permite y facilita el trabajo en el aula pues es un modelo muy parecido al de pizarra tradicional, por otro lado el hecho de ser táctil permite que tanto los estudiantes como el profesor hagan mas fácil su trabajo en la pizarra y además es mas incluyente para casos de estudiantes especiales que tengan problemas motrices. Cuenta con las aplicaciones necesarias para el trabajo de aula en cualquier asignatura, y su costo es más accesible. Esta es la opción que me pone más cerca del sueño de muchos profesores, convertir el aula en un espacio para la imaginación, la fantasía y el aprendizaje.
he escuchado que esta pizarra en un salon de clase corre peligro si es golpeada con fuerza es verdad esto?
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